Capilla de San Antonio Manises
Conocida coloquialmente como “La Capelleta” está dedicada a San Antonio Abad y es el único vestigio que queda de la primitiva Iglesia Parroquial de San Juan Bautista. Estuvo en funcionamiento entre 1370, año en el que se redacta el acta de fundación de la Parroquia de Manises, y 1751, año en el que se inauguró la nueva iglesia. Ha sido restaurada en distintas actuaciones dando lugar a un estilo ecléctico con predominio de características neoclásicas en el exterior y neogóticas en su interior. Presenta un cuerpo rectangular, más alto que ancho, rematado por una espadaña y a ambos lados dos pináculos de cerámica de reflejo metálico. Destaca la puerta de madera con herrajes y la pila bautismal, ambos elementos conservados de la iglesia original, así como el zócalo de azulejos y otras decoraciones en cerámica.
El edificio actual es de estilo neogótico y realizado en ladrillo, aunque se pueden encontrar elementos más antiguos, posiblemente del siglo xiv, en la parte posterior.
La fachada está dividida en tres cuerpos verticales por dos columnas y rematada frontón triangular de vértice muy agudo, con espadaña con campana acabada con una cruz. Destaca su atrio delantero con arcos apuntados. Sobre los arcos laterales se abren ventanales y sobre el central un óculo con doble reborde, todos ellos acristalados. La vivienda del ermitaño está adosada al cuerpo principal y tiene sobre la puerta un panel cerámico con imagen de la santa.
La cubierta del templo es a dos aguas, recubierta con teja árabe y entablado de ladrillo macizo de apoyo.
A la nave principal se accede por una puerta de madera en forma de arco apuntado que se abre en el atrio de la fachada principal. Se cubre con bóveda de crucería y el piso es de baldosas blancas y negras. Presenta la estructura típica de las iglesias de reconquista, esto es, planta rectangular dividida por arcos diafragmas. Tiene el coro a los pies y cuatro capillas laterales cubiertas por bóvedas de arista. Una de las capillas laterales está dedicada a San Blas. El presbiterio tiene bóveda de cascarón con nervios blancos. En él se conserva la imagen de Santa Ana con la Virgen Niña, del siglo xiv realizada en alabastro. San Blas y Santa Ana son los patrones de Albal.